La Respiración Funcional

La respiración funcional se enfoca en optimizar la forma en que respiramos para mejorar nuestra salud y bienestar general.

Se centra en el uso eficiente del diafragma, la respiración nasal y la regulación del volumen de aire, buscando un equilibrio entre el oxígeno y el dióxido de carbono en el cuerpo.

Se utiliza para una variedad de propósitos, desde reducir el estrés y la ansiedad hasta mejorar el rendimiento deportivo y la calidad del sueño. También se aplica en el tratamiento de problemas respiratorios como el asma y la apnea del sueño, así como en la rehabilitación pulmonar después de una enfermedad o cirugía.

A continuación, se describen nueve de los beneficios más relevantes de la respiración funcional:

Conoce la Respiración Funcional *

• Reducción del estrés y la ansiedad: La respiración profunda y consciente activa la parte del sistema nervioso que promueve la relajación.

• Mejora del sueño: Una respiración adecuada puede ayudar a regular el sistema nervioso y facilitar un sueño más reparador.

• Aumento de la concentración y la claridad mental: La oxigenación adecuada del cerebro mejora la función mental y la capacidad de concentración.

• Optimización del rendimiento deportivo: La respiración eficiente mejora la oxigenación muscular y la resistencia física.

• Fortalecimiento del sistema inmunológico: La respiración genera equilibrio en los sistemas del cuerpo que desempeñan un papel crucial en la defensa del organismo.

• Regulación de la presión arterial: La respiración lenta y profunda puede ayudar a reducir la presión arterial en personas con presión alta.

• Alivio del dolor: La respiración consciente puede ayudar a reducir la percepción del dolor y promover la relajación muscular.

• Mejora de la digestión: La respiración diafragmática estimula el sistema digestivo y favorece la absorción de nutrientes.

• Aumento de la energía y la vitalidad: Una respiración eficiente asegura una oxigenación adecuada de las células, lo que se traduce en mayor energía y vitalidad.

En resumen, la respiración funcional se presenta como una herramienta poderosa y accesible para mejorar significativamente nuestra salud y bienestar. Al enfocarnos en una respiración consciente y eficiente, podemos influir positivamente en diversos aspectos de nuestra vida, desde la reducción del estrés y la ansiedad hasta la optimización del rendimiento físico y mental.

Es fundamental recordar que, si bien la respiración funcional ofrece numerosos beneficios, no reemplaza la atención médica profesional. Es recomendable consultar con un profesional de la salud, para tratar cualquier afección médica.

Al integrar la respiración funcional en nuestra rutina diaria, podemos cultivar una mayor conexión con nuestro cuerpo y mente, promoviendo un estado de equilibrio y vitalidad.

• McKeown, P (2015) El Poder del Oxígeno, Irlanda .Editorial Gaia